ALGUNOS ASPECTOS DE POESÍA INCONCLUSA
De Alejandro Miranda Contreras.
MAGO Editores, 2009.

Por Máximo G. Sáez

El poemario está dividido en dos partes:

DIARIO DE UN APRENDIZ DE DRAGON (ELEGÍA DE UN SUEÑO CREPUSCULAR DEL SOLSTICIO DE INVIERNO)
1990-1992. Y SILENCIO 1990-2006

En la primera parte del libro podemos observar a un hablante convencido de que la soledad es parte central del quehacer. No obstante, el ánimo no tiene nada que ver con esa constatación ya que se produce una mixtura entre resignación y alegría:

Me gusta verlos partir

La voz del hablante, no es una voz dolorosa aunque, los temas que trata están llenos de esos lugares que no regresan a raíz del paso del tiempo. Emerge la figura de los trenes - el autor es originario de San Bernardo, lugar con presencia notable de trenes en toda su existencia- y los trenes simbolizan la transitoriedad ese permanente viaje donde algo se queda y algo llega. No puedo pasar por alto el recuerdo que se me viene de Jorge Teillier, poeta lárico donde los trenes están metidos en su poesía y donde la transitoriedad del ir y volver fue centro de su trabajo literario. Elementos comunes se hayan en la poesía de Miranda, sobre todo en esa relación de soledad y viaje:

Los trenes
Son los duendes de los dragones
Y yo,
Soy sólo un solitario

El recuerdo sigue siendo ese viaje al pasado que atormenta al poeta, sobre todo porque ya es imposible el reencuentro con ese territorio que ahora se asoma como construcción de un imaginario, un imaginario que el poeta no desea y que teme:

Tengo más miedo a los recuerdos
Que a la muerte

El pasado es un veneno
Que destruye como el sueño

En esta primera parte el let motiv son los recuerdos que el poeta no quiere recordar y, que incluso en varios versos los vincula con el mundo onírico para confundir conscientemente realidad y artificio, como resultado nos queda una voz agonizante que determina:

Renaceré de mis cenizas

SILENCIOS 1990 – 2006

Esta segunda parte expresa un tópico que atraviesa a gran parte de la poesía universal: el silencio. Ese gesto híbrido entre materialidad y sensibilidad y que en este caso, el poeta aprovecha para que su voz se pierda y no se escuche y aparezca la voz de los otros y podemos estirar más esta posibilidad y decir la voz de los lectores, nuestra voz:

Qué te diré
Cuando la muerte aturda tu conciencia?
¿Y la justicia no sea la verdad?

Las oposiciones marcan los espacios dejados por una voz en silencio, esa voz que escucha como la sociedad pende de un equilibrio precario a la hora de las decisiones, y el amor no queda ajeno a esa precariedad. El silencio, se hace protagonista en cuanto omite las conclusiones que ve pero no ejerce nada para cambiarlas. Nuevamente el recuerdo tiene importancia porque es una más de las expresiones del silencio:

Bebo noche,
En la noche sin recuerdos
Bebo solo

La noche como figura de la omisión de la memoria, pero también como silencio y el silencio como pérdida viene a terminar de pintar el cuadro donde la soledad y la insatisfacción del hablante son elementos fundacionales en esta segunda parte del poemario:

El agua cubre los cadáveres
Y el silencio se vuelve poesía

Definitivamente se produce el entrelazado entre la figura del silencio y la poesía propiamente tal. Y es la poesía, la que a través de la palabra reconstruirá la pérdida de la memoria, pero jamás reconciliará al hablante con el recuerdo, jamás habrá una poesía conclusa:

El silencio ya no es nuestro
Ahora soy su único dueño

La transitoriedad, el viaje, los recuerdos que no se recuerdan, los espacios que dejan expresarse al silencio, la memoria en esa relación de pérdida de los imaginarios hacen de Poesía inconclusa, un libro hondo signado por una voz que cuestiona lo más íntimo del ser humano, por una voz que escarba en la inmaterialidad de una sociedad teñida por la materialidad. Poesía inconclusa, muy por el contrario de estos versos:

Descubrí sobre el asfalto
Que mis pasos no dejan huellas

En definitiva, Poesía inconclusa, es un poemario que marca y nos invita a reflexionar -aunque parezca tan absurdo en estos días- sobre nosotros mismos.