Entrevista : Sebastián Edwards

Reviviendo la Guerra Fría con las Tanias

Por Jorge Queirolo Bravo

Introducción.-

En Chile estamos acostumbrados a leer en la prensa escrita las opiniones de Sebastián Edwards cada vez que se da un acontecimiento importante relacionado con la economía y sus vaivenes. Sus declaraciones suelen ser esperadas y muy respetadas por los gobiernos de turno, los empresarios y los políticos, sin que importe su tendencia, pensamiento o ideología. Se puede discrepar o estar de acuerdo con él, pero los criterios que emite en materia económica no dejan a nadie indiferente, lo cual incluye tanto a los estudiosos de este tópico como a los legos en el tema.

Lo raro, lo desusado, lo no habitual, lo asombroso, es que de repente haya aparecido una novela escrita por tan prestigioso economista. No se trata de querer menoscabar su innegable talento, pero en lo previo no se le conocían públicamente habilidades específicamente literarias. Y lo mejor del caso, es que se trata de una obra de ficción muy cosmopolita y buenísima, por no decir excelente, que mezcla magistralmente lo imaginario con numerosos elementos tomados de la realidad, desembocando así en una suerte de realismo técnico muy bien logrado y convincente.

Sebastián Edwards ha demostrado, con creces, que es un maestro a la hora de urdir tramas entretenidas y que tiene, de sobra, pasta de novelista. Además narra los hechos con suma precisión y a ratos su prosa contiene un notable parecido con las mejores obras de Frederick Forsyth, aunque con un estilo propio y hasta mejorado en ciertos aspectos, en el que menciona un rincón que el antes nombrado inglés normalmente ignora u omite: América Latina. Así, Sebastián logra armar con fuerza una historia de intriga que, adicionalmente, agrega un toque de atracción formidable para el lector latinoamericano. Bien por él. Recién comienza y ya se ganó merecidamente al público amante de la literatura en la región.

Leí “El misterio de las Tanias” embelesado, con rapidez, sin poder soltarlo y con mucha atención, por lo que no pude dejar de querer saber cómo es la forma de pensar de su autor y qué factores desconocidos lo llevaron a debutar en el mundo novelístico. Las siguientes preguntas y respuestas lo revelan en detalle, mostrándonos que algunos economistas no se limitan al frío universo de los números, los pronósticos sobre la inflación venidera, los análisis de la producción y las estadísticas, sino que también tienen en su interior más íntimo otras sensibilidades muy diversas y ajenas a su quehacer. ¿Cuál será la siguiente sorpresa que nos deparará Sebastián? Dejemos que sea el tiempo el que nos responda tal interrogante.

Preguntas.-

JQB: ¿Qué factores pueden inducir a un economista acostumbrado a escribir sobre su área a crear una novela de corte policial y detectivesco?
SE: Hay una razón fundamental: tenía una buena historia. La historia de espías cubanas entrenadas en los años setenta y que aún estarían infiltradas en las altas esferas de las sociedades latinoamericanas. Es una historia que debía contarse. A través de ella voy narrando una serie de subhistorias que tienen que ver con la amistad, la nostalgia, el desarraigo, la lealtad y la traición.


JQB:¿Qué te llevó a elegir a Cuba como la base de la trama, en referencia a la creación de las Tanias, si la guerra fría terminó hace ya bastantes años? ¿No pensaste que el tema podía estar desfasado o fuera de moda?
SE: El fin de la Guerra Fría es parte de la historia que se narra en la novela. Una vez terminado ese conflicto las Tanias ya no esperaban ser activadas por La Habana. Creían que sus vidas como espías eran algo del pasado. Por eso, cuando son llamadas a la acción, se desesperan; literalmente se les derrumba el mundo.


JQB: ¿Tu formación de economista influyó en la estructuración del libro y sus argumentos?
SE: Creo que sí. Estructurar una novela requiere de un pensamiento bastante analítico, y para ello mi formación académica fue útil. Pero sólo parcialmente. En el mundo académico uno escribe en forma muy lineal: uno plantea una pregunta, expone una teoría que ayuda a responderla, discute los métodos estadísticos disponibles y, finalmente, expone los resultados obtenidos en la investigación. En literatura la narración lineal rara vez funciona. Como dijo Joseph Brodsky, lo más difícil al hacer narrativa es decidir en qué orden uno cuenta la historia; el “qué sigue a qué”.

JQB: ¿Vas a seguir escribiendo novelas? ¿Viene alguna obra nueva en camino?
SE: Creo que voy a seguir escribiendo ficción. De hecho, estoy empezando a pensar en una novela que narra la historia de un chileno que tuvo un rol destacado durante la Segunda Guerra Mundial. Es una novela cosmopolita, donde hechos políticos e históricos son usados para explorar relaciones humanas y conflictos profundos. Esta nueva novela todavía está en un estado muy preliminar.


JQB: ¿Cuáles son tus referentes literarios? ¿Alguno influyó decisivamente en ti?
SE: Soy un gran admirador de Graham Greene. También de Richard Ford, William Boyd, Martin Amis, Javier Marías, Mario Vargas Llosa, Haruki Murakami y Zadie Smith.


JQB: ¿Visitaste todos los escenarios, ciudades y países que aparecen en el libro?
SE: “El Misterio de las Tanias” es lo que Javier Cercas, el autor de “Soldados de Salamina”, ha llamado un “relato real”. Es una obra de ficción que está inserta dentro de un marco histórico muy exacto y real. Escribir de esta manear requiere hacer una investigación exhaustiva. Yo visité prácticamente todos los lugares que se mencionan en la novela. También investigué las prácticas de los servicios secretos cubanos y el modus operandi de la guerrilla argentina. Fue un proceso largo, pero fascinante.


JQB: ¿Cómo ves a la literatura chilena actual? ¿Cuál es tu percepción sobre la misma, considerando que vives en el exterior?
SE: Siento gran admiración por los escritores chilenos. Creo que tenemos novelistas de gran nivel, los que trabajan con seriedad y dedicación, a pesar de que el ambiente es pequeño y a veces difícil. Además tienen que convivir con el pirateo de sus obras y un escaso apoyo por parte de las autoridades. La verdad es que hacen una labor admirable. Entre la gente joven me gusta mucho Alejandro Zambra.


JQB: ¿Cómo sientes que ha sido la recepción que el público ha brindado a tu libro en Chile?
SE: Estoy muy contento. La novela de las Tanias ha sido recibida excelentemente bien. La gente la está comprando –en tres semanas llegó al primer lugar de uno de los rankings y al segundo lugar en el otro– y ha recibido muy buenos comentarios. Cuando estuve en Chile la gente me paraba en la calle para hablarme del libro. Me decían “voy en Suiza” o “ya voy en Moscú”. Mucha gente ha buscado a los personajes principales en la Internet. La verdad es que me siento muy halagado.

JQB: Hasta antes de leer “El misterio de las Tanias” tenía la impresión de que ideológicamente te inclinabas más a la izquierda, pero pude observar que también criticas con fuerza a la revolución cubana. ¿Estoy en lo cierto?
SE: Desde un punto de vista político es perfectamente posible ser progresista, e incluso ser de izquierda, y ser muy crítico del régimen cubano. Y eso es exactamente lo que sucede en la novela. Uno de los personajes principales –el historiador Roberto Stevenson, asesinado en Bogotá– es claramente un hombre de ideas avanzadas. De muchacho marcha junto a Martin Luther King y es apaleado por la policía en Chicago por defender a las minorías. Sin embargo, es tremendamente crítico de Fidel y del Che Guevara. Siente que la revolución cubana es un enorme fraude que ha desperdiciado la vida de millones de personas.


JQB: ¿Realmente crees que el Opus Dei es tan poderoso en Chile como afirmas en el libro? ¿Piensas lo mismo de la iglesia católica, que año a año ve reducir el porcentaje de sus fieles en el total de la población del país?
SE: No sé cuán poderoso es el Opus Dei. En la novela a uno de los personajes le parece cómico imaginarse que una señora que pertenece a ese movimiento religioso es, en realidad, una espía cubana. La verdad es que yo también lo encuentro divertido.


JQB: ¿Es posible que el contenido encierre elementos autobiográficos? Si es así, ¿fueron introducidos voluntariamente o fue algo que se dio espontáneamente?
SE: Como en todo “relato real”, en “El Misterio de las Tanias” hay una línea tenue y a veces imperceptible que separa lo real de la ficción. Es una línea que deliberadamente dejé en la ambigüedad. Por ejemplo, el narrador, cuyo nombre nunca llegamos a conocer, es profesor de economía en la UCLA en California, y tiene una esposa llamada Alejandra. Yo enseño economía en esa universidad y mi mujer se llama Alejandra. Sin embargo, a mí me gusta pensar que esas son simples coincidencias. Ni el narrador soy yo, ni sus experiencias están basadas (necesariamente) en las mías.


JQB: ¿Eres un buen lector? ¿Qué tipo de libros son los que sueles leer?
SE: Soy un lector compulsivo. Leo y leo, en todo lugar y a todas horas. Leo literatura contemporánea, ya sea en inglés o en castellano. Leo una gran cantidad de novelas recién aparecidas. A veces también leo o releo a los clásicos.


JQB: ¿Escribir es para ti un desahogo? ¿Te relaja?
SE: He escrito toda mi vida. Si bien “Las Tanias” es mi primera novela, no es mi primer libro. Para mí escribir siempre ha sido un desafío. Un desafío que consiste en expresarse con limpieza y claridad. Ahora, escribir ficción es distinto, y más difícil, que escribir ensayos. La mayor dificultad está en encontrar la voz del narrador y, a través de ella, transmitir una personalidad y un estado de ánimo. Pero la verdad es que escribir no me relaja ni desahoga. Más bien me obsesiona.


JQB: ¿Hay algún autor o novelista latinoamericano que admires?
SE: Muchos. De joven fui un fanático de Cortázar, Borges y Sábato. “Sobre Héroes y Tumbas” es, posiblemente, la novela más inquietante que he leído; sólo comparable a “Estrella Distante” de Bolaño. Vargas Llosa es esencial. Bolaño me deslumbró desde un principio. También siento gran admiración por los escritores latinoamericanos que escriben en inglés: Cristina García, Julia Álvarez y Óscar Hijuelos, entre otros. Admiro a Cabrera Infante, quien escribió un libro magnífico en inglés, “Holy Smoke”. Lo de Cabrera Infante es especial, porque terminó escribiendo en una lengua que no era la materna por necesidad; porque Fidel Castro lo privó de su patria. Otros autores que han escrito en lenguas extranjeras por necesidad son Joseph Conrad y Nabokov.


JQB: ¿El tesoro de los Montoneros realmente existió? ¿Fue tan cuantioso?
SE:
Desde luego que existió. Todos los acontecimientos históricos que se narran en la novela son verdaderos y sucedieron tal como se cuentan. El dinero de los secuestros de los Montoneros existió y, hasta el día de hoy, hay una polémica sobre qué pasó con él. En “El Misterio de las Tanias” se cuentan las distintas teorías que se barajan, y se ofrece una alternativa diferente a las existentes. Una teoría alucinante e inquietante.


JQB: ¿De verdad te aburren tanto las conferencias? Hay varias menciones bastante explícitas sobre el particular.
SE: La verdad es que sí. En general me aburren bastante, aunque siempre hay excepciones.