ANDRÉS BELLO GÓMEZ

MEXICO

BIOGRAFÍA

Nació en 1953 en Michoacán, México

Narrador, Ensayista, Traductor

Licenciado en letras de la Universidad Autónoma de México, tiene un master en Literatura Hispanoamericana por la Universidad de San Carlos de Guatemala. Actualmente reside en L.A. California, y tiene a su cargo el área de traducción al español en un estudio cinematográfico de Hollywood.

A su trabajo debemos la traducción a nuestra lengua de varias cintas clásicas, de la filmografía de directores como Steven Spielberg, Robert Redford, John Huston y Lawrence Kazdam.

PONENCIA

Amigos, los saludo con el agrado de haber sido convocado a este I Encuentro Virtual De Escritores. La idea de este aspecto de nuestra participación, entonces, es compartir nuestro punto de vista acerca de la incorporación de la herramienta electrónica al servicio de las letras. En lo personal, quiero referirme a los libros electrónicos pioneros de nuestra época.

 

Comenzamos trabajando en tablas de arcilla, luego fuimos al papel, y de él a la pantalla. El libro electrónico es un nuevo soporte para nuestro trabajo. En septiembre recién pasado debutaron en América y Europa, tres nuevas versiones de libro electrónico. Aún no son baratos, pero eliminarán los costos de impresión y distribución, ya que los títulos se bajan de Internet.

Los libros electrónicos son pequeñas pantallas que pueden soportar hasta 100.000 páginas de texto e imágenes. Se pueden marcar, escribir notas, traen diccionario, traductor y luz propia. Si uno se cansó de leer, puede incluso oírlo; aunque esto último aún no viene incorporado: sí traen pantallas sensibles al tacto en B/N y color. En comparación a los primeros libros electrónicos, como los Franklin o el Bookman de Sony, que tenían sus textos en discos y tarjetas, estas nuevas versiones (SoftBook Press, NuvoMedia y Librius) utilizan la capacidad de enviar volúmenes de material a bajo costo a través de Internet. No son baratos todavía. Los precios van de los 200 a los 1600 dólares, sólo por el hardware. Después de cargar la compra, se descarga inmediatamente, a través de un PC, o directamente al flamante E-libro: que reemplazará a nuestras heroicas bibliotecas. Las compañías que hace unos días han puesto a la venta los E-libros tienen diferentes productos y tácticas comerciales, pero todas esperan ganar más con la venta de los libros que con las ganancias del hardware mismo. Los más optimistas anuncian que los libros sólo costarán 1 dólar.

 

La diferencia es que en vez de recibir al libro de papel, como en Amazon.com, se comprará una versión electrónica, encriptada, que se bajará al PC inmediatamente. Allí se grabará en el E-libro para después traspasarla al RocketBook (costö: bajo 225 dólares) siempre que se desee. Este hardware, del porte de un libro de bolsillo, con tapas de cuero, soporta 4.000 páginas de texto y gráficos, con una pantalla sensible al tacto y legible desde cualquier ángulo, en la que se puede puede leer y oír, trae su diccionario, fuentes ajustables y múltiples funciones para destacar, anotar, buscar, clasificar y marcar. Las baterías duran 20 horas si se usa la luz, y 45 si no. NuvoMedia, los fabricantes, han establecido un convenio con la cadena de librerías "Barnes & Noble" para que venda las ediciones digitales de libros a sus clientes, con un aporte inicial de 2 millones de dólares americanos.

La otra versión electrónica de libro que ha entrado estos días al mercado es el SoftBook: un libro por teléfono. Su hardware vale menos de 300 dólares. Los clientes deben comprometerse por dos años a comprar cada mes de 10 a 20 dólares en libros, con todo tipo de ofertas para enriquecer el E-libro. Abrir su cubierta de cuero activa inmediatamente la visualización de 9,5 pulgadas de la página en que se quedó. Pesa 1.300 grs (el RocketBook, 570 grs). Puede guardar hasta 100.000 páginas de texto, dibujos y gráficos que se pueden buscar, destacar y marcar. También se pueden hacer anotaciones y cambiar el tamaño de la fuente (al fin un libro con las letras del tamaño que desea el lector). Su batería provee de 5 hrs de uso. Para cargar los libros, basta conectar el SoftBook a una línea telefónica y preseionar un botón. El módem interno de la máquina (de 33,6 Kbps) marca automáticamente la dirección del almacén de SoftBook, sin necesidad de un PC. Cuando toca el libro deseado, se carga en la tarjeta de crédito y baja el libro. Si lo desea otra vez, se baja gratis ya que en la cuenta principal quedó constancia de que ya se pagó por él.

 

El Millennium Reader, de Librius, tiene el tamaño de un libro de bolsillo y pesa 500 gramos. El diseño bitmap de su pantalla permite que los libros estén en cualquier lenguaje, como el chino o el árabe, y soporta 10 libros de textos e imágenes. Tiene ventajas similares a los anteriores, como fuentes ajustables o luz propia. Su precio es inferior a 200 dólares, y la novedad es que no sólo se descargan los libros que se puede adquirir en línea, sino además se espera que los libros se puedan cargar en una tienda.

 

El más caro libro electrónico aparecido estos días es el Everybook, orientado a las reproducciones de alta calidad de los gráficos de los libros. También aunadas las características de todos los anteriores, más algunos tactos especializados para el color nítido, su precio oscila en los 1600 dólares. Para el año 2000 se pretende que cuesten no más de 750 dólares, y deberá llegar a no más de 500 en los primeros años del nuevo milenio. En los próximos meses ya preparan lanzar sus versiones de libro electrónico Xerox, Disney, Microsoft, Peanut Press y otros. En lo personal, amigos asistentes al I Encuentro de Escritores en Lengua Española, estoy de acuerdo en que vivimos un momento privilegiado para las letras. Nuestro trabajo tiene los mejores auspicios. Quiero terminar agradeciendo que se me haya invitado, y os envío un abrazo a todos los presentes. Que Dios os bendiga. Andrés.