1- Qué
es para usted la literatura
Ya sea como autor o lector, la literatura la entiendo como una manera de relacionarme
con mis sueños y obsesiones; una manera de explicarme la realidad que
vivo, de comunicarme con otras personas, y de ser feliz.
2- Cuál
es su opinión de la literatura chilena actual
En general, considero que está en un muy buen pie, con muchos autores
–poetas y narradores- que están dando a conocer sus obras. Desde
luego, para su mayor proyección, considero que falta nuevos medios editoriales,
más audaces y menos regidos por el mercado, que sean capaces de descubrir
nuevas voces y dar cuenta de la rica diversidad literaria que se expresa en
revistas, talleres y encuentros.
3- Cuál
es su relación con sus compañeros de generación
Básicamente es una relación de amistad con algunos, y de lectura
de sus obras, con la mayoría. Como en todas las cosas de la vida, es
una generación que con el paso de los años se ha ido decantando.
Algunos de mis compañeros de generación han logrado una buena
proyección de sus obras, otros no han tenido la misma fortuna, pero en
general la siento como una generación que está activa y de cuyos
integrantes cabe esperar muchas obras más. Recientemente, junto al escritor
Diego Muñoz Valenzuela, publicamos la antología “Cuentos
en dictadura” en la que hemos incluido a varios autores de nuestra generación
que escribieron sus primeros cuentos en la década de los años
80.
4- Cuál
es el poeta y el narrador vivo más importante actualmente en Chile
Una tendencia malsana en nuestro medio literario es andar buscando “el
nombre” del mejor poeta o narrador, como si no pudieran coexistir en una
mismo tiempo una serie de autores de talento y con diferentes proyectos. Toda
lista de autores es injusta y desde luego subjetiva. Tengo muchos poetas y narradores
que forman parte de mis afectos y admiración, pero me niego a tratarlos
como si fueran caballos de carrera, peleando por un lugar en las estadísticas.
La riqueza literaria de un país no se mide por la existencia de “el
poeta” o “el escritor”, sino que por el reconocimiento de
una diversidad de autores, con diversas búsquedas.
5- Qué opina de la nueva institucionalidad cultural
Desconozco sus alcances, pero espero que sea algo positivo. En el país
falta mucho para alcanzar un buen nivel cultural y siempre me va a parecer algo
positivo todo aquello que apoye a los creadores y aparte a la gente de la banalidad
e ignorancia que impone la sociedad actual. Espero que, entre otras cosas, signifique
un apoyo a las revistas y editoriales chilenas.
6- Tiene
planes para publicar próximamente
Editorial LOM acaba de reeditar mi novela “Solo en la oscuridad”
(inédita en Chile y publicada en Buenos Aires, el año 1992), y
en las próximas semanas debe aparecer, también bajo el sello LOM,
la reedición de “Nunca enamores a un forastero”, y la primera
edición de “El color de la piel”, texto que continúa
con la serie de las novelas protagonizadas por Heredia. Por otra parte, en enero,
aparece en Francia la traducción de mi novela “Angeles y solitarios”,
y la edición de bolsillo de “Los siete hijos de Simenon”,
novela publicada en Francia el año 2001. También, de aquí
a fines de año, tendría que publicarse en Croacia mi novela “Angeles
y solitarios”.
7-Cuáles son sus 3 principales virtudes y defectos
Es difícil juzgarse a sí mismo, ya sea para bien o para mal. En
el plano de las virtudes, supongo que soy bastante trabajador en las cosas que
me interesan, porfiado en mis juicios y proyectos, y fiel a mis afectos y principios.
En el plano de los defectos, suelo ser algo pesimista, tímido en exceso,
y poco dado a reconocer el valor de mi trabajo.
8.- La
crítica literaria existe en Chile.
Aprecio, con bastante optimismo, la emergencia de una nueva camada de críticos,
algunos de los cuales ya ocupan un espacio reconocible en los medios periodísticos
tradicionales, y otros escriben en revistas alternativas como “La calabaza
del diablo”, “Libros & Lectores” y otras más. Sin
duda estamos frente a un ejercicio crítico mucho más activo e
interesante del que existía en el país hace quince o veinte años
atrás. Hay que ver cómo evoluciona este fenómeno.
